Por Jorge Felix
Editor del Semanario "El Veraz"

En cualquier país del mundo las manifestaciones existen, espontáneas, organizadas por grupos informales o no, a favor o en contra de un propósito o ideal.

Eso lo vemos en cada país democrático que respete el estado de derecho. Esa es la democracia, la libertad de demostrar pacíficamente su acuerdo o desacuerdo con una situación determinada.

Pero si usted cree, que existe algo semejante en Cuba, debe de despertar.

En Cuba no existen manifestaciones espontáneas .... vuelvo a recalcar, espontáneas a favor de el Gobierno, al menos en los últimos 30 años no ha sido así... la efervescencia ¨revolucionaria¨ desde entonces dejó de existir en Cuba.

Por mas de 30 años esas manifestaciones ¨Voluntarias¨, son organizadas tácitamente por las fuerzas represivas del gobierno cubano, para reprimir y contrarrestar las verdaderas manifestaciones espontáneas y voluntarias en contra del gobierno.

En el mundo libre, de todos es conocido como el partido en el poder, controla y obliga a los que trabajan para el gobierno a acudir a las manifestaciones, en base del chantaje económico, pero en el mundo libre, existe la propiedad privada o cualquier otra alternativa, si no quiere trabajar para el gobierno se va a trabajar a otro lugar.

Estoy seguro que los que trabajan para el izquierdista de café con leche Gaspar Llamazares en España tienen que aplaudir a Llamazares por mucha estupidez que hable, porque Llamazares le consiguió el puesto de trabajo y le paga un sueldo, pero al menos esa persona cansada de escuchar las idioteces del Señor Llamazares puede irse a trabajar con el Partido Popular o el Partido Socialista o en una empresa privada y dejar en soledad aun más a Llamazares

Ahora imagínese como es eso, en un país como Cuba, donde toda la economía, los puestos de trabajo, las escuelas, tienen un solo patrón, donde el gobierno cubano dice quien, como y donde puede trabajar y si no acude a esas manifestaciones no puede trabajar en ningún lugar... es el chantaje elevado a la máxima potencia. Un pueblo tan castrado como el cubano durante años de represión, no tiene escapatoria. Pinochet hubiera sentido envidia, Hitler no hubiera sido derrotado, es la idea platónica del totalitarismo.

Ya hemos hablado de algunos de los modus operandi de cómo se organizan estas manifestaciones en pro del gobierno.

Pero hagamos un poco de historia, los cubanos que me leen saben a que me refiero, los sucesos del Mariel, los grupos de acción rápida , el maleconazo del 5 de agosto, donde las fuerza de la policía se ponían camisetas y cascos de constructores y salían a golpear a personas inocentes.

Durante mas de 40 años el gobierno cubano se dedicó a sembrar el odio entre los propios cubanos, entre vecinos, entre familiares, en la escuela, entre cubanos que se iban y los cubanos que no se iban, los que se iban eran gusanos... los que no se iban eran patriota... y después si esos patriotas se iban también, pasaban al bando de los gusanos... y si sucedía la rareza que un gusano retornara... entonces era patriota.... ósea que existió toda una política ideológica encaminada a ese odio entre cubanos, cosas que llenan de admiración a Canallas y personas sin honor como el presidente Chávez

Pero quizás la primera gran siembra de odio social se materializo en el 1980, cuando los sucesos del Mariel, grupos represivos organizados por el gobierno cubano, entre ellos la policía política o Gestapo cubana como la llaman en la actualidad, la unión de jóvenes comunistas, los asqueantes Comité de Defensa y el partido comunista llevaron a los cubanos a dedicarse a la infamia y a la vileza de golpear a mujeres, niños, ancianos que solo querían abandonar el país donde se sentían asfixiados....

El año 1980 fue la perdida de la inocencia para muchos en Cuba que nacieron y crecieron en la mal llamada revolucion.

Este que escribe con 17 años vio con su propios ojos como una turba de cientos de personas golpeaba y desnudaban a una mujer en plena calle y le lanzaban todo tipo de objetos, mientras que la pobre infeliz corría por toda la calle tapándose los senos.

Y si en aquel entonces fue una orientación bajada por el gobierno cubano a todas las organizaciones represivas... (en la actualidad nada a cambiado), so pena de no poder trabajar o estudiar en ninguna parte... la gran mayoría optó entonces por participar en ese linchamiento social, en esta embriaguez de sangre... pero hubo muchos que dijeron no a esta infamia, este que escribe al igual que esos dijo no, no obstante saber de las consecuencias y la marginación a la que pudiera ser llevado.

No se trata de alarde de valentía ni mucho menos, se trata de humanidad... simple humanidad, de cualquier persona que se respete así misma como tal. A tan temprana edad descubrí la bajeza de la mal llamada de la revolución y los que la defienden, desde entonces la odié. Dije no en aquel entonces... dije no después, no formaría parte de una infamia.

Nací y crecí hasta hace solo 6 años en la mal llamada revolución. Este que escribe, no se hizo gusano en el exilio, de lo cual me siento orgulloso, soy gusano de corazón, de pura cepa....de raíces profundas... porque si hay algo que debo de agradecer a la mal llamada revolución fue que me hizo gusano en las entrañas del comunismo, a pesar del adoctrinamiento que llevo a cabo en toda Cuba.

Perdieron conmigo... yo gané... agradezco al gobierno cubano porque fue quien me hizo adorablemente gusano.