Jay Martínez
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La semana pasada estuvo de visita en Puerto Rico, por una invitación del Senado y la Cámara de Representantes, el honorable y muy querido por el exilio cubano Sr. Lincoln Díaz Balart.

El Congresista tuvo la oportunidad de participar en la actividad que los diputados de Puerto Rico le ofrecieron a la reunión disidente planeada por la Asamblea para Promover la Sociedad Civil para el 20 de mayo.

El Sr Balart ofreció una conferencia de prensa donde fue interrogado por los reporteros con preguntas relacionadas con la política hacia Cuba las cuales el Congresista contestó de una manera elegante y contundente siempre en favor de la libertad del pueblo cubano.

El Señor Balart recivió halagos y detalles por parte del exilio residente en Puerto Rico así como de sus amigos legisladores puertorriqueños aunque, como era de esperar, también participaron los grupitos pro castristas, Comité de ''Solidaridad con Cuba'' y el Frente ''Socialista.'' Esto es posible ya que en Puerto Rico disfrutamos de una verdadera democracia gracias a la constitución del gobierno de la Isla y a la de los Estados Unidos que garantiza el derecho a la libre expresión de todos los ciudadanos.

Los miembros de estas organizaciones todos juntos no sumaban 20 personas. Aunque tengo que reconocer que hacían ruido con sus equipos de audio y gritería callejera. Quiero expresar que a mi en lo personal no me molestaban en lo más mínimo aunque lo que gritaban eran insultos y calumnias típicas de los comunistas y estoy seguro tomaron ese ''cursito'' en las tribunas de la Habana a donde estos elementos viajan con frecuencia.

La única diferencia estriba en que aquí son una ínfima minoría que nadie escucha ni les hace caso. Tuve la suerte de encontrarme con uno de estos manifestantes frente a frente y tuve la oportunidad de hacerle algunas preguntas con mucho respeto.

La respuesta del manifestante sólo fue que Cuba era independiente y que Puerto Rico no y que era una colonia que llevaba I00 años bajo el dominio del imperio. Yo les expresé que tenían todo el derecho de manifestarse pero que mis compatriotas en Cuba no podían hacer lo mismo. No gozan de la libertad de criticar abiertamente a sus adversarios políticos.

Les dije: “Todos sabemos que lo que están pregonando son calumnias y mentiras y a la persona que se lo están diciendo es un Congresista de los Estados Unidos y no ocurre nada. Cuando esto termine se van tranquilos para sus casas y mañana seguramentes los principales periódicos los colocarán en sus portadas y en los noticieros. Y todo terminará ahí mientras en la Isla de Cuba, aunque independiente geográficamente, sus ciudadanos no gozan de los derechos básicos a la libertad de reunión y expresión ni pueden disentir de la línea oficial trazada por el Partido Comunista, único partido que gobierna y se postula a las “eleccciones” en Cuba”.

Lo ideal sería que a ese ''gobierno'' que ustedes defienden con tanta pasión les permitiera a mis compatriotas en Cuba hacer lo mismo y que cada vez que alguien visite a mi país las personas pudieran salir a protestar y que la prensa les diera el espacio y reconocimiento que ustedes tiene aquí. Ustedes están predicando la moral en calzoncillos. Por una parte, con todo el derecho que les da el vivir en este sistema democrático, critican al honorable visitante y por otro, defienden a un tirano que lleva 46 años en el poder por la fuerza sin permitir elecciones y arrestando a todo el que se oponga a su pensamiento.

Lo que podemos concluir de todo esto es que los manifestantes pro castristas en Puerto Rico apoyan al gobierno cubano sin conocimiento real de lo que ocurre en la Isla. Ignoran a los presos políticos, ignoran las faltas de libertades básicas que ellos disfrutan en esta democracia y sus sentimientos antimperialistas se ven claramente identificados con el odio a los Estados Unidos que pregona día tras día el gobierno cubano.

Cuba es independiente pero sus ciudadanos no lo son. Puerto Rico no es independiente pero sus ciudadanos disfrutan de la Libertad y Ustedes constituyen la mejor evidencia.